lunes, 25 de abril de 2011

Sonrisas

Es curioso, últimamente he estado pensando en ti.

Lo se, lo se, no tiene nada de curioso que lo haga, de hecho es bastante lógico, pero antes, semanas antes, tú llegabas a mi mente como pasado, como memorias y a veces, como un deseo insoportable de poseerte y hacerte mío por una sola vez. Pero ahora no. Ahora eres anécdotas, instantes que en su momento fueron insignificantes y ahora no paran de arrancarme sonrisas.

Imagínalo así: ayer al estar jugando Super R-Type, recordé la forma en la que te burlabas de mi cada vez que aparecía un Game Over en pantalla. Recordé como nos llevábamos pesado y aprovechándome de esa estúpida inocencia tuya, te hablaba en doble sentido sin que tú lo notaras.  Extraño eso; todos esos detalles insignificantes.

¿Qué importan los abrazos cuando recuerdo tu risa, tu sonrisa cuando me escuchabas decir alguna idiotez?

Y extrañando, y con las sonrisas escapándose de mi rostro no logro entender muy bien lo que pasa. Me siento triste porque ya no te extraño como “al ser amado”, sino como al amigo que perdí en algún lado.

“Todo estaba destinado a acabar” eso lo se de sobra y me he acostumbrado a vivir con ello. Pero hoy extraño a mi amigo, al que fue mi mejor amigo y al tiempo que disfrute con él.

2 comentarios:

kabi dijo...

si algo he aprendido, es que tu NUNCA escoges a tus amigos, por mas bombardeo televisivo que afirma que si.

ja, si yo los hubiera escogido, me habria matado hace ya tanto... por que los q me escogieron, valen mas de lo que valian los q yo escogi... paradoja o algo asi

nunca lamentes el que te hayan dejado. nunca lamentes nada.
nunca te arrepientas de nada.

eres lo que eres gracias a lo que fuiste, nunca lo olvides, saukerl.

duele como el carajo.
pero todo pasa.
y un dia te encuentras un amigo, un colega... no se, tal vez alguien mas.

y te hace entrar irremediablemente en la edad de la pendejilla.
todo aquel dolor se vuelve tan lejano, que ni siquiera sabes si fue real o producto de tu ociosa mente.

te amamos miquel.

Carlos Benito dijo...

Sí son sonrisas, ¡disfrútalas!
Sí son tristezas, ¡disfrútalas!
Sí son justo ahora, ¡disfrútalas!
Sí son recuerdos, ¡disfrútalas también!

Disfruta todo, hasta el punto del límite, y quizá hasta tantito más allá…

Paz, amor y alma